Hay muchas personas que tienen en su imaginario discutir y luego empotrarse contra la puerta. O bien durante la discusión o después de discutir dando lugar a sexo desenfrenado en todas las superficies de la casa. Es normal, esto es lo que durante mucho tiempo nos han vendido en infinidad de películas, hasta el punto que parece que si no haces esto con tu pareja eres raritx.
Pero el sexo de reconciliación no siempre es tan maravilloso como nos lo pintan, ni tiene que porque gustarle a todas las parejas. Simplemente puede que no apetezca solucionar un problema con sexo. De hecho, hay quienes no son capaces de follar si tienen aún cosas por decir, discutir, debatir o compartir con el otro.
Aunque si este tema te preocupa en la dinámica de tu relación, en lo que a los conflictos se refiere, estate tranquilx, porque tanto si eres de lxs que necesita ese encuentro como si eres incapaz de ponerlo en marcha en “caliente” (nunca mejor dicho), ambas tendencias tienen aspectos positivos.
Si resolvéis el conflicto que os ha generado esa discusión antes de follar, puede llevaros a una conexión que antes no hubierais tenido y así disfrutar de un gran encuentro. Si resolvéis el conflicto tras haber practicado sexo, este hecho puede mejorar el ambiente enrarecido por la discusión y dar paso a que podáis hablar las cosas con otra energía y desde otro punto bien distinto.
Una disputa, discusión o conflicto suele conllevar una transferencia de emociones. Es habitual pasar por un alto estado de agitación que puede ser producido por la rabia, la angustia y/o el miedo, y acabar dándose una gran excitación sexual entre ambxs.
De hecho, algunas parejas experimentan una descarga de adrenalina y testosterona tras un conflicto que les provoca una sensación similar a la que les suele dar el sexo. Ya que, desde el punto de vista emocional, la amenaza de la pérdida por una discusión, suele activar el apego.
Es entonces cuando muchas parejas empiezan a experimentar la necesidad de sentir cerca al otro, física y afectivamente. Y no hay nada que se acerque más a esa sensación que el sexo.
Algo curioso es que también se activa el mecanismo de compensación tanto a una misma como hacia nuestra pareja.
Intentamos contrarrestar los momentos vividos con malestar y enfado con otros más placenteros. Es por eso que, como hemos comentado antes; si se resuelve el conflicto antes de follar será diferente que si no se ha hecho. Si alguno de los dos aún guarda rencor, durante el sexo puede expresarlo de forma física, por eso, en estos casos, el encuentro serviría como calmante.
Otra idea que tenemos al hablar de sexo de reconciliación en nuestro imaginario es que es fogoso, muy impulsivo, muy animal. Esto se debe a que nos conecta precisamente con nuestro lado más primario y es una respuesta natural al miedo. Miedo a perder la intimidad, a perder a la pareja, el amor. Miedo al abandono.
Se suele dar porque como no sabemos expresar nuestras emociones mediante palabras, acudimos al sexo para expresar aquello que sentimos.
Es una forma más tangible de sentir la conexión que existe. Pero acudir siempre a este método de resolución de conflictos puede denotar un déficit de comunicación en la pareja y es posible que sea necesaria alguna herramienta más de gestión de los conflictos.
Este tipo de parejas tienden a expresar emociones positivas durante el encuentro erótico que se desvanece rápidamente después del mismo para volver al conflicto no resuelto. Con ésto, se hace cada vez más bola aquello que les genera malestar, incluso llegando a establecer relaciones de pareja violentas.
Como siempre decimos, para una sexualidad sana y placentera no son necesarias las discusiones; y si se dan, siempre hay herramientas para poder comunicarnos desde el respeto y la escucha activa.
Si después de leernos te ha removido el tema podemos hablar de tu caso en particular en una sesión y que nos cuentes mejor qué está pasando y cómo lo estás viviendo tú.
Te dejamos sin ningún compromiso nuestro contacto, por si quieres trabajar el tema y vivirte desde otro lugar entendiendo qué pasa. Mándanos un correo a equipo@somospeculiares.com o llámanos o escríbenos por WhatsApp: 644 605 758
